Premios Manda Huevos

Los Premios Manda Huevos son unos premios que otorga la Komparsa Moskotarrak y la forma de elección consiste en elegir por el curioso método de estampar un huevazo en su fotografía al personaje más popular de la villa durante el año entre aquellos cinco elegidos por votación popular. 

El premio consiste en una estatuilla de un gigante con txapaela

La Komparsa Moskotarrak fue fundada en 1978

Este año, 2022 ha sido otorgado a la popular actriz Itziar Ituño

Farolín y Zarambolas

En 1984, tres miembros de la Comisión Mixta de Fiestas, Fernando Toja, Marino Montero y Josepe Zuazo, inventaron los personajes “Farolín y Zarambolas” para los Carnavales de Bilbo.

FAROLÍN : es un o una bilbaina -no hace falta que haya nacido en el mismo Bilbao-, que se ha distinguido notablemente en su actividad profesional o pública, alardeando además de su condición botxera, y cuyo principal lema podría ser Semper Plus Ultra (Siempre Más Allá). El color que distingue a Farolín es el blanco.

ZARAMBOLAS : es un o una pancha, persona de Bilbao al que nada le afecta ni le cambia la vida. Adalid del buen vivir, cuyo modo de vida se sintetiza en el Carpe Diem. El color que disitngue a Zarambolas es el rojo.

El juicio entre Farolín y Zarambolas surgió para instituir en los carnavales de Bilbao uno de los elementos más representativos de las Carnestolendas tradicionales y rurales, donde se juzgaba y condenaba a los malos de cada año.

En el caso de la Villa se optó por dar al tema un tratamiento en tono humorístico, evitando la ecuación bueno-malo y optando por un galardón con el propósito enfatizar la dualidad de la personalidad arquetípica bilbaína.

De manera que estos personajes son el único símbolo original y distintivo de los Carnavales de Bilbao.

Actualmente, el “proceso” popular contra Farolín y Zarambolas comienza con su detención en el Ayuntamiento. Los maceros de la Villa son quienes escoltan a nuestros protagonistas hasta la celda y una vez en ella son acompañados hasta la Plaza Nueva por una kalejira de Fraiskus, Momos, Hartza, Monjas, Turkos e Higis, jaleándoles durante todo el recorrido.

Ya en la Plaza Nueva , da comienzo el juicio en el que abogado, fiscal y diferentes testigos representados por konpartsakides, dan cuenta de las andanzas de Farolín y Zarambolas .

Una vez escuchadas las alegaciones para su defensa , la voz suprema del estrado emite el veredicto final y son trasladadas nuevamente a su celda a la espera de recibir su carnavalesco castigo ….en la misma Plaza Nueva, donde desde el patíbulo serán sometidos al escarnio público que pondrá fin a su enjuiciamento….por este año.

En 1998, la Comisión nombró Zarambolas a uno de sus creadores, Marino Montero, relaciones públicas del Café Boulevard que celebró allí mismo el nombramiento con cava y pollo frito. Invitó a todos los que habían ostentado aquel título hasta el momento, y el éxito de la reunión le llevó a crear en 1999 –junto a la comparsa Moskotarrak– La Orden Botxera de Farolín y Zarambolas. Desde entonces, el primer lunes después de Reyes se reúnen en torno a una chocolatada para proponer los candidatos del año.

Figuras e instituciones txirenes, representativas de Bilbao, han personificado durante estos más de treinta años el papel de Farolín y Zarambolas: Ramón Lecea, José María Gorordo, K-Toño Frade, Ana Urkijo, La Otxoa, Juan Manuel López Iturriaga, Antxón Urrosolo, Kepa Junkera, José Mª Arrate, Los Cinco Bilbaínos, Claudio Landa, Mikel Urdangarín, Yolanda Alzola y Txetxu Ugalde, el Athletic Femenino, la Sociedad Ciclista Bilbaína, la familia Thate, Petiso o Las Fellini son solo algunos de los nombres más conocidos.

El único que lo ha sido en 2 ocasiones ha sido el que fuera alcalde de Bilbao, Jose Mª Gorordo que lo fue en los años 1988 y 1991.

Pregonero (o Pregonera) y Txupinera

El Pregonero es la persona encargada de leer el pregón que anuncia el comienzo de las fiestas. Si bien los primeros años corrió a cargo de los comparseros, en 1980 fue el alcalde, Jon Castañares, el encargado de leerlo. A partir de entonces la Comisión decidió elegir a una persona o colectivo conocido de Bilbao para ocupar el puesto.

Hasta el año 1986 el pregonero se limitaba a leer su pregón y desaparecía de las fiestas, pero dicho año Natxo de Felipe, por iniciativa propia, asistió a diversos actos festivos, dándole una mayor dimensión al cargo.

En 1988, Josepe Zuazo diseñó un uniforme de pregonero compuesto por chaquetilla en frac amarilla, bicornio negro empenachado, cinturón o gerriko blanco y pantalón o falda blanca para diario y negro para ceremonia. Un uniforme que comparte características similares con el de las milicias liberales que defendieron la villa frente a las tropas carlistas durante los Sitios de Bilbao.

La txupinera ha sido históricamente un empleo municipal desempeñado exclusivamente por mujeres, cuyo papel era avisar a los vecinos de las grandes solemnidades mediante el disparo de cohetes o chupines. La primera Comisión de Fiestas decidió recuperar esta figura que desde entonces correría a cargo de una comparsera. Así, cada año se realiza un sorteo entre las comparsas y ellas mismas designan internamente a su representante.

En 1983 se encargó al escultor José Ángel Lasa la realización de la “percha” lanzachupines y la makila representativa del cargo de Txupinera, que este realizó en maderas nobles (roble viejo para la “percha”; tejo para el pomo de la “makila”, que permite su ensamblaje con la “percha”, para según que usos; y boj para la vara) por un precio de 80.000 pesetas. La “percha” será respuesta en el año de 1995 por el mismo José Ángel Lasa, para cubrir la desaparición de la original. Estos elementos son guardados en el Ayuntamiento y entregados por la Txupinera saliente a la recién elegida. La primera Txupinera en utilizar la “percha” y “makila” del cargo fue Alazne Olabarrieta de la konpartsa Mamiki en 1983.

Y como el de pregonero, este oficio también cuenta con uniforme de gala, diseñado por Alejandro Gutiérrez en 1985: guerrera roja con charreteras y vivos al cuello negros y botonadura dorada, falda negra, txapela roja con el escudo de Bilbao bordado, medias blancas y zapatos de charol negros. El uniforme tiene similitudes con el de las tropas carlistas que asediaron y bombardearon Bilbao durante el primer Sitio de Bilbao, especialmente su característica boina roja.

El uniforme, costeado con cargo a los presupuestos municipales de fiestas, lo corto y cosió un familiar de la propia Mª Luisa Crespo, Txupinera de ese año de 1985, pero apenas si fue usado más allá de los actos oficiales de inicio y final de Aste Nagusia.

En 1986, el entonces presidente de la Comisión de Fiestas, el exconcejal Julián Fernández, entendió que el Ayuntamiento no tenía porque sufragar el Uniforme de la Txupinera, y la Coordinadora de Konpartsas tampoco lo tenía claro, así que entre cuatro de aquellas Konpartsas: Txomin Barullo, Hontzak, Tintigorri y Pinpilinpauxa hicieron frente a los gastos necesarios para que la Txupinera de ese año, Manoli Cruces, volviera a llevar aquel uniforme. Pero Manoli, que compartió cargo con Natxo de Felipe, como Pregonero, apenas si se quitó el uniforme en toda la semana, acudiendo a todos los actos posibles. Quedaba establecido el “Uniforme de la Txupinera”.

Marijaia

Marijaia es un personaje ficticio, icono o símbolo de la Semana Grande de Bilbao. Fue diseñado por la pintora y grabadora Mari Puri Herrero el 19 de agosto de 1978, tras cinco días de trabajo, por encargo de la Comisión de Fiestas.

El nombre vasco Marijaia viene a significar en español «Señora de las Fiestas». Herrero concibió este personaje como una mujer de aspecto tradicional vasco, con ropajes rurales y pañuelo en la cabeza. Su rostro es cómico, de rasgos prominentes y sonrosado. En señal de optimismo y baile, lleva los brazos en alto.

Siguiendo el diseño de Herrero, cada año se elabora un ejemplar de Marijaia a gran escala, al modo de los antiguos gigantes y cabezudos. El inicio de las fiestas, el sábado siguiente al 15 de agosto, lo marca la lectura del pregón por parte del pregonero/a y el lanzamiento del txupín (cohete) por parte de la txupinera desde un balcón del teatro Arriaga. Instantes después aparece en el balcón la gran Marijaia, que presidirá la Aste Nagusia o Semana Grande bilbaína. El último día era quemada en la plaza del teatro Arriaga, marcando el final de nueve días de fiesta, aunque desde el año 2009, la quema de «Marijaia», no se hace en la plaza del Arriaga, sino que es quemada mientras hace un paseo por la ría a modo de despedida.

Desde 1997 Marijaia tiene una canción propia, llamada «Badator Marijaia» (Ya viene Marijaia), compuesta por Kepa Junkera y Edorta Jiménez. (Texto de la Wikipedia)

Los Gigantes y Cabezudos de Bilbao

Evidentemente los Gigantes y Cabezudos no son exclusivos de Bilbao ni mucho menos. Pero en nuestra villa tienen un arraigo especial y profundo y se puede datar su existencia ya en el siglo XVI. Y además los nuestros tienen unos personajes «muy nuestros».

GIGANTES

A principios del siglo XVI, al extenderse la fiesta del Corpus Christi a las grandes poblaciones como Bilbao, se incorporan a la tradicional procesión religiosa la mascarada de danzantes y una serie de personajes y figuras como los Gigantes, la Tarasca y los Enanos o Rabís, éstos últimos provistos de caretas y vejigas. Desde entonces se han venido sucediendo generaciones de Gigantes y Cabezudos en la Villa.

La primera noticia de su existencia en Bilbao procede de un inventario de 1654 en el que se mencionan cuatro vestidos para Gigantones, descritos, años más tarde como reyes moros o mejor fantasmones, dichos a lo sarraceno, compuestos toscamente con una cabeza de cartón, largas túnicas, correones y alfanjes, parecidos a los de otras ciudades.

En la siguiente centuria, además de las Moras reconocibles por sus atributos, surge un personaje descrito como un figurón a lo caballero con su pareja que, presidirán, en adelante, todas las generaciones de Gigantes de la Villa bajo los nombres de Don Terencio y Doña Tomasa, aunque desconocemos el origen y motivo de tales títulos.

En la primera mitad del siglo diecinueve el cortejo incluirá dos nuevos personajes, el Turco y la Turca, que, junto con las históricas parejas de Don Terencio y Doña Tomasa y El Moro y la Mora, simbolizarán en la generación de 1852 los continentes de Asia, Europa y África, a los que acompañaran, en la siguiente, los representantes de América y Oceanía.

1893

El 2 de mayo de 1896 se estrena una nueva generación de ocho gigantes con otros tantos cabezudos construidos en el taller escultórico de Basterra y Larrea. Su composición se conoce por una fotografía en la que aparecen retratados delante del nuevo Ayuntamiento de Bilbao. En ella figuran, los veteranos Don Terencio y Doña Tomasa, una pareja de Aldeanos del Valle de Arratia, personajes que al parecer habían surgido en una comparsa anterior, los ya conocidos Turcos y una pareja que, a pesar de su tez oscura y atributos, eran llamados El Moro y la Mora y, que sobreviven en el imaginario festivo por una canción dedicada a la Reina Mora.

1896

Echados a perder, en 1934 Radio Emisora Bilbaína promovió una cuestación popular para la reedición de una nueva saga de Gigantes, Cabezudos y Gargantúa encargando su modelado y talla al escultor Higinio Basterra. En la nueva comitiva la pareja de Moros es sustituida por una de Chinos. Entregados a la Villa para uso y disfrute de su ciudadanía sucumbirán una vez más por la desidia de las autoridades en 1951

1938-1945

Y será de nuevo la emisora, ahora denominada Radio Bilbao, quien, en 1962, promoverá la construcción por suscripción popular de una nueva generación en la que los Turcos y los Chinos son sustituidos por personajes extraídos del Cancionero Bilbaíno: El Inglés que vino a Bilbao y al ver la Bilbainita ya no se quiso marchar y el Angulero de la Ría y la Sardinera de Santurce.

1962

Desaparecidos éstos, en 1978, la Comisión de Fiestas, organizadora de la primera Bilbao Aste Nagusia popular promueve la creación de una nueva generación de Gigantes, Cabezudos y la rehabilitación del Gargantúa de 1962, encargando el trabajo a Pedro Goiriena de Kilikilariak – Cómicos de la Legua, siendo presentados en febrero de 1980. La comitiva de Gigantes pasa de 8 bultos a los 12 actuales, con la incorporación de cuatro nuevos personajes en representación de las clases trabajadoras que habían contribuido al engrandecimiento del Bilbao de principios del siglo, y dos más, en sustitución de El Angulero y la Sardinera, simbolizando la dualidad liberal-tradicionalista de la Villa y sus vecinas Anteiglesias. Así, a los ya veteranos Don Terencio y Doña Tomasa, los Aldeanos (caracterizados como El Aldeano Xelebre y la Etxekoandre) y el Inglés y la Bilbainita se unen el Ferrón o Minero de San Francisco y la Cigarrera de la Compañía de Tabacos de Santutxu, el Marino y la Carguera, además de la pareja formada por la Reina Isabel II y el general carlista Zumalacarregui. Estuvieron en activo hasta 1989, año en que fueron sustituidos por la actual generación, perdiéndose en el camino Doña Tomasa e Isabel II. Hoy guardados por el Ayuntamiento de Bilbao y bajo los cuidados de Toño Valdivieso, los podemos disfrutar en el Museo, cuando bajan de sus cuarteles de invierno.

Dº Terencio

Don Terencio
Autor: Cómicos de La Legua- Kilikilariak: Pedro Goiriena, 1980.

Don Terencio y su pareja Doña Tomasa son los personajes que desde el siglo XVIII presiden la alta corte giganteril de Bilbao, formando parte de todas las generaciones de las que guardamos memoria. Representan a lo que algunos cronistas atribuyen como la figura del corregidor y su esposa, y otros a la de un caballerito ilustrado y su dama, con mantilla y abanico, como reza la canción.

Aldeano Xelebre y la Etxekoandre

El Aldeano xelebre y La Etxekoandre

Autor: Cómicos de La Legua – Kilikilariak: Pedro Goiriena, 1980.

La pareja de aldeanos aparece en torno a 1895 caracterizados como Arratianos representando a los pobladores del ámbito rural bizkaino, protagonistas junto con los bilbaínos de la vida social y festiva de la Villa.

La pareja de aldeanos de 1980 personifica los arquetipos de Etxekoandre y Aldeano Xelebre.

El Inglés y la Bilbainita

El Inglés y La Bilbainíta

Autor: Cómicos de La Legua – Kilikilariak: Pedro Goiriena, 1980.

El Inglés venido a Bilbao y al ver a La Bilbainita ya no se quiso marchar, fueron los personajes que se incorporan en 1962, por iniciativa de Radio Bilbao al socaire de uno de los temas clásicos del cancionero popular bilbaino: «Un inglés vino a Bilbao

Ferrón o Minero de San Francisco y la Cigarrera de la Compañía de Tabacos de Santutxu

El Ferrón o Minero y la Cigarrera

Autor: Cómicos de La Legua – Kilikilariak: Pedro Goiriena, 1980.

Pareja que encarna al Minero de San Francisco y a las trabajadoras de la Compañía Arrendataria de Tabacos (1898-1936) de Santutxu, en Begoña. Propuestos por la Comisión de Fiestas organizadora de la primera Aste Nagusia popular de 1978, fueron incluidos como representantes de las clases trabajadoras que contribuyeron al engrandecimiento del Bilbao de principios de siglo XX.

El Marino y la Carguera

El Marino y la Carguera

Autor: Cómicos de La Legua – Kilikilariak: Pedro Goiriena, 1980.

Pareja que representa a las clases trabajadoras relacionadas con la navegación y el comercio bilbaíno, materializados en el marino que surcaba los mares y las cargueras que se ocupaban del trasiego de mercancías en los muelles. Fueron propuestos por la Comisión de Fiestas organizadora de la primera Aste Nagusia popular de 1978 y presentados con sus congéneres en febrero de 1980.

Zumalacarregui

Autor: Cómicos de La Legua – Kilikilariak: Pedro Goiriena, 1980.

El general carlista Tomás Zumalacarregui, herido de muerte en el Sitio de Bilbao, en 1835, es incorporado a la generación de 1980, junto con la Reina de España entre 1833 y 1868, Isabel II, como alegoría de la dualidad liberal-carlista de Bilbao y las Anteiglesias vecinas.

En 1988 el Ayuntamiento de Bilbao encargó la construcción de una nueva generación de Gigantes y Cabezudos a José Ignacio Urbieta (Deba 1916-99) que contó con la colaboración de Jesús Uranga y del artista fallero Vicente Luna, para su moldeado en poliéster. Presentada un año más tarde está formada por doce bultos repitiendo los personajes de sus inmediatos antecesores, y a los que, en 1998, año del centenario del Athletic Club, se unirán, de la mano de la Comparsa Moskotarrak, la pareja formada por Rafael Moreno Aranzadi «Pichichi» y su mujer Avelina Rodríguez Miguel «Lina», modelados por Conchi Maoño en el Taller de Artesanía Cerámica Loitz (Angela Azcona y Alex González) y vestidos por Estibalitz Berrio.

D Terencio y Dª Tomasa

Don Terencio y Doña Tomasa

Autor: José Ignacio Urbieta, 1988.

Pareja de personajes que desde el siglo XVIII presiden la alta corte giganteril de Bilbao, formando parte de todas las generaciones de las que guardamos memoria. Representan a lo que algunos cronistas atribuyen como la figura del corregidor y su esposa, y otros a la de un caballerito ilustrado y su dama, con mantilla y abanico, como reza la canción.

Aldeano y Aldeana

El Aldeano y La Aldeana

Autor: José Ignacio Urbieta, 1988.

Los aldeanos aparecen en torno a 1895 caracterizados como Arratianos representando a los pobladores del ámbito rural bizkaino, protagonistas junto con los bilbaínos de la vida social y festiva de la Villa. La pareja de 1980 personifica los arquetipos de Etxekoandre y Aldeano selebre que, en la de 1988, no se repite.

El Inglés y la Bilbainita

El Inglés y La Bilbainita

Autor: José Ignacio Urbieta, 1988.

El Inglés venido a Bilbao y al ver a La Bilbainita ya no se quiso marchar, fueron los personajes que se incorporan en 1962, por iniciativa de Radio Bilbao al socaire de uno de los temas clásicos del cancionero popular bilbaíno: «Un inglés vino a Bilbao».

Un inglés vino a Bilbao por ver la ría y el mar

pero al ver las bilbanitas, ya no se quiso marchar,

y dijo:

Vale más una bilbainita

con su cara bonita

con su gracia y su sal

que todas las americanas

con su inmenso caudal

con su inmenso caudal

El Ferrón y la Cigarrera

El Ferrón o Minero y la Cigarrera

Autor: José Ignacio Urbieta, 1988.

Pareja que encarna al Minero de San Francisco y a las trabajadoras de la Compañía Arrendataria de Tabacos (1898-1936) de Santutxu, en Begoña. Propuestos por la Comisión de Fiestas organizadora de Aste Nagusia 1978, fueron incluidos como representantes de las clases trabajadoras que contribuyeron al engrandecimiento del Bilbao de principios de siglo XX.

El Marino y la Carguera

El Marino y la Carguera

Autor: José Ignacio Urbieta, 1988.

Pareja que representa a las clases trabajadoras relacionadas con la navegación y el comercio bilbaíno, materializados en el marino que surcaba los mares y las cargueras que se ocupaban del trasiego de mercancías en los muelles. Fueron propuestos por la Comisión de Fiestas organizadora de la Aste Nagusia popular de 1978 y presentados con sus congéneres en febrero de 1980. El marino está vestido como un pescador de nuestras costas

Zumalacarregui e Isabel II

Isabel II y Zumalacarregui

Autor: José Ignacio Urbieta, 1988.

Isabel II, Reina de España entre 1833 y 1868, y el general carlista Tomás Zumalacarregui, herido de muerte en el Sitio de Bilbao, en 1835, son incorporados a la generación de 1980 como alegoría de la dualidad liberal-carlista de Bilbao y las Anteiglesias vecinas.

En 2017 el vestuario de Isabel II fue renovado por Beatriz Valdivieso

En 1998, año del centenario del Athletic Club, se unirán, de la mano de la Comparsa Moskotarrak, la pareja formada por Rafael Moreno Aranzadi «Pichichi» y su mujer Avelina Rodríguez Miguel «Lina», modelados por Conchi Maoño en el Taller

Pichichi y Lina

Pichichi y Lina

Autora: Conchi Maoño en el Taller de Artesanía Cerámica Loitz (Angela Azcona y Alex González) Rafael Moreno «Pichichi» (1892 – 1922) y su mujer Avelina Rodríguez «Lina» son los personajes que, inspirándose en el cuadro de Aurelio Arteta ‘Idilio en los campos de sport’, se incorporan a la comitiva, en 1998, por iniciativa de la Comparsa Moskotarrak en homenaje al Athletic Club de Bilbao, en el año de su centenario

Con motivo de la celebración del 80 aniversario del 1o Gobierno Vasco (1936- 37), la familia Giganteril vio aumentado su número con el gigante del Lehendakari José Antonio Aguirre. Durante su primera estancia veraniega en el Museo Vasco en 2017 se hizo un concurso para buscarle pareja resultando elegida, por amplia mayoría, Dolores Ibarruri «La Pasionaria».

En la actualidad, los barrios de Bilbao cuentan con sus propios Gigantes: Basurto disfruta de los cuatro Gigantes del grupo de danzas Beti Jai Alai; Deusto tiene la Comparsa de Gigantes Ondalan con gigantes, mamutxak y gigantiilos y Santutxu la comparsa Mairuek Gaztediko Erraldoiak. Cada año, en Aste Nagusia y en otras celebraciones y concentraciones, los Gigantes de 1988 precedidos por los diez Cabezudos que les van abriendo paso entre el gentío, recorren las calles y plazas de la Villa bailados por dantzaris al son de las gaitas y en compañía de los txistularis, miembros, todos, de Bizkaiko Dantzarien Biltzarra. (Texto y material del folleto del Museo Vasco)

CABEZUDOS

RABIS, ENANOS/AS, GIGANTILLAS, MOMOS Y CABEZUDOS

Son los personajes que enmascarados o con grandes cabezas de cartón, y siempre armados de infladas vejigas, abren el paso a los Gigantes. Su presencia en las festividades religiosas de Bilbao está recogida, desde, al menos el siglo XVI, recibiendo distintos nombres según su aspecto y función en el cortejo: momos, enanos, gigantillas o rabís. Nombrados siempre colectivamente, su apariencia y número ha ido variando, hasta los actuales que conocemos como Cabezudos. Por las fotografías de finales del siglo diecinueve podemos distinguir varias generaciones de enanos, como se les denominaba, en razón de que eran una réplica, en pequeño, de sus señores, los gigantes.

La de 1895 estaba integrada por cuatro parejas formada por: bilbaínos, aldeanos, chinos mandarines y amerindios, personajes que se repetirán en la siguiente comitiva de 1896 con algún cambio en las caracterizaciones de bilbaínos y aldeanos. En el siglo veinte los séquitos de Cabezudos tendrán personalidad propia, representando a tipos populares o personajes reconocibles por la ciudadanía, siendo así que la generación de 1934 incorpora a: la Señorita Elena, locutora de Radio Bilbao, el ciclista Federico Ezquerra y al futbolista Belauste del Athletic Club, a los que se unirán, tras la guerra el enharinado y el mulero de Vista Alegre y, en la de 1962, un tamborilero, un torero y los payasos Hermanos Manrey.

Programa de fiestas 1897

La comitiva actual de cabezudos de Bilbao consta de diez personajes. Siete de ellos supervivientes de un séquito mucho más amplio perteneciente a la generación de Gigantes y Cabezudos de 1980, realizados por Kiliki-lariak – Cómicos de la Legua: un hombre y dos mujeres vestidos a la usanza medieval; el diácono con sus dos monaguillos (estos últimos, en origen, con diferente caracterización) y el Aldeano que algunos llaman Carbonero por su cara tiznada. Los tres restantes se han ido incorporando paulatinamente por iniciativa de las comparsas bilbaínas.

En Aste Nagusia del año 2000 con motivo del 700 Aniversario de la Villa, la comparsa Moskotarrak encargó el León rojiblanco y en el 2006, promovió, con el patrocinio de El Correo, la réplica del personaje de viñeta Don Celes, de Luis Olmo, al coincidir con su 60 cumpleaños, ambos modelados por Conchi Maoño en el Taller de Artesanía Cerámica Loitz (Angela Azcona y Alex González).

Por último, en 2012 Bilboko Konpartsak incorporó un cabezudo que personifica el diseño que Juan Carlos Eguillor realizó en 1978 para la Pañoleta Azul Bilbao de la primera Aste Nagusia y que representa el escudo de Bilbao tocado con txapela y pies para qué os quiero. (Texto y material del folleto del Museo Vasco)

Aste Nagusia

De la colección “De Bilbao de toda la vida” de Tomás Ondarra y Jon Uriarte

¿Cómo nació la Aste Nagusia de Bilbao? ¿Desde cuando, en qué circunstancias?

En 1977 Zorion Eguileor, periodista y locutor de radio, lanzó desde su programa la idea de realizar una kalejira y de esta forma iniciar unas futuras fiestas populares, callejeras, participativas,… El éxito de la convocatoria superó al propio Eguileor y ese día se dieron cita en la calle unas 5.000 personas. Hombres y mujeres de todas las edades, ikurriñas, banderas del Athletic, txistularis, dantzaris,…

En este mismo año, con una gestora municipal en el Ayuntamiento y con un alcalde en funciones, José Luis Berasategui, que no se presentaría a las elecciones, se volvió a presentar la propuesta, y esta vez sí fue aceptada. El concurso de ideas “Hagamos populares las Fiestas de Bilbao” fue finalmente convocado por el Ayuntamiento de Bilbao y patrocinado por El Corte Inglés. El prólogo fue el siguiente:

“Las Fiestas de Bilbao. Durante años y tradicionalmente se ha asegurado que carecen de la autenticidad de una participación popular. Que las Fiestas de Bilbao, en definitiva, no son populares. No trascienden al gran público de Bilbao porque el pueblo no participa en ellas. Repetidamente se ha tratado el tema en nuestros medios de comunicación social, en el sentido de que las fiestas en su espíritu y argumento más popular deben representar el tipismo y la personalidad de un pueblo.

Por ello, El Corte Inglés con la colaboración del Ayuntamiento de la Villa y la participación de los medios informativos, convoca el presente Concurso de Ideas bajo el lema “Hagamos populares las Fiestas de Bilbao”.

Somos los propios bilbaínos quienes debemos aportar, sugerir, las ideas realizables de unos festejos eminentemente populares, que satisfagan a las gentes de nuestros barrios, a la comunidad toda de los vecinos de Bilbao y que respondan a la expresión más sincera de conseguir, entre todos, “hacer un Bilbao mejor”.

Ahora tenemos la oportunidad de hacer algo positivo, de construir los comienzos de unas verdaderas fiestas del pueblo, pensadas por el pueblo y realizadas por y para el pueblo con la participación de todos los bilbaínos. ¡Esta es la ocasión!”

Se redactaron las Bases del Concurso y, una vez aprobado por la Comisión Municipal Permanente, se lanzó el 1 de abril de 1978 cerrándose el plazo de admisión de propuestas el 31 de mayo. El premio era de 100.000 pesetas pagadas por los grandes almacenes.

Se buscaba una amplia participación ciudadana con la presentación de ideas realizables y para ello el articulado que se redactó era sencillo y claro. Las críticas hacia la campaña fueron duras y se la tachó de marketing comercial. A pesar de todo siguió adelante y tuvo bastante éxito.

Una vez cerrado el plazo se habían registrado 37 proyectos. El jurado se reunió el 9 de junio de 1978 y seleccionó dos trabajos. El voto de calidad del Presidente del jurado resolvió el empate y el reparto del premio se hizo de la siguiente forma:

El 75% del premio se lo llevó el proyecto “Txomin Barullo” presentado por la Comisión de Cultura y Arte de la Organización en Vizcaya del Movimiento Comunista de Euskadi (EMK).

El 25% del premio se lo llevó el proyecto “Tximbo Zarra” presentado por Luis Cardas.

El concurso era consultivo y no vinculante. Sin embargo, tanto desde los movimientos populares como desde los propios ganadores del concurso, se buscó comprometer al Ayuntamiento para que lo llevase a cabo y al final, con muchas reticencias se consiguió. 1978 fue un año muy especial y coincidió que el movimiento asociativo estaba en auge y que se iba a producir el cambio político en las instituciones.

A raíz de esto, y para crear la Primera Comisión de Fiestas abierta y popular, se convocó a una asamblea en los locales de la biblioteca de Bidebarrieta el 28 de junio a todos los organismos culturales, deportivos, partidos políticos, sindicatos,… consiguiéndose una numerosa asistencia. Esa misma noche se conformada la Comisión de Fiestas que se constituiría el 2 de julio. Estaba formada por 17 miembros: Angel Cámara, Maria Jesus Lanciano, Santiago Burutxaga, Álvaro Gurrea, Karmelo Landa, Josepe Zuazo, Itziar Villa, Natxo de Felipe, Antonio Caro, Felipe Fernández, José Manuel Martínez, Marino Montero, Eduardo Aretxalde, Iñaki Bengoetxea, Manu Fernández, Josetxu Martínez y Marga Vázquez.

En esta Comisión de Fiestas no hubo ningún concejal y fue la más amplia y popular de todas. Hasta el alcalde en funciones, Berasategi, se marchó de vacaciones y toda la responsabilidad para organizar las fiestas quedó en manos de esa Comisión. Era curioso ver como todos los estamentos, policía municipal, bomberos, bedeles,… esperaban órdenes de esa Comisión y le presentaban sus informes.

En seguida se pusieron a trabajar para en este corto periodo de tiempo organizar unas fiestas. Se designó a Karmelo Landa, del colectivo cultural Txomin Barullo, como portavoz. Las reuniones de la Comisión de Fiestas tenían lugar en el Ayuntamiento, en una sala anexa al Salón Árabe, y el presupuesto aprobado por el Ayuntamiento sería de 8.438.000 ptas. Para no dispersar a los participantes se decide centralizar los actos en un único espacio geográfico, el recinto festivo, y se eligió la zona del Arenal y Casco Viejo. En este espacio la mayoría de las actividades serían gratuitas. (Texto de la Wikipedia)

Luego fueron viniendo Marijaia, el txupinazo, el Pregonero y la Txupinera, las konpartsas, sus txoznas, los fuegos artificiales y el kalimotxo, sobre todo el kalimotxo. Pero todos tendrán su hueco en este blog

En el año 2009 la Aste Nagusia / Semana Grande Bilbao fue elegida como uno de los 10 tesoros Tesoros del Patrimonio Cultural Inmaterial de España

Uno de los emblemas de la Aste Nagusia han sido y son sus carteles festivos. El primero fue

que ha sido inmortalizado en un mural de cerámica, obra de Jose Sainz de Ocariz “Jota” en el año 2016 en el Arenal

Otros carteles