Fuente del Perro

De la colección ·De Bilbao de toda la vida» de Tomás Ondarra y Jon Uriarte

Muy cerca de la plazuela de Santiago, esta fuente parietal es una opción muy interesante con su pantalla modulada en tres calles de arcadas a la manera egipcia, como sus sendos surtidores de bronce, cabezas de león –no de perro – con sus «nemes» y su pila, trasunto muy estrecho de los sarcófagos romanos de estrígilos.

La fecha de 1800que lleva este inédito elemento, justifica su arqueologismo.

La fuente del Perro. Se trata de un pequeño monumento neoclásico que recibe su nombre actual en los albores del 1800 cuando, tras la renovación de la antigua fuente de los Chorros de San Miguel, se instalan nuevos caños cuyo parecido con la cabeza de un perro es innegable. Desde entonces la gente empezó a llamarla la fuente del Perro y así surgió el nombre que hoy conocemos. Es curioso porque, en realidad, se trata de cabezas de león que pretendían acompañar el conjunto de arcadas de tipo egipcio.

La Fuente del Perro, una pieza, aparentemente menor, plenamente vigente en su uso original, destaca entre las demás por la frescura de su concepción y por lo que entraña como referencia de la arquitectura que surgió del inspirado

Atribuida la autoría a los maestros Juan Bau­tista de Orueta y Miguel de Maruri, la propia descripción de Basas insinúa un reconocimiento inte­lectual más amplio acorde con aquella sociedad vasca de la que emergió la “Bascongada de los Amigos del País”.

Los reputados como posibles autores de la obra: Juan Bautista de Orueta y Miguel de Maruri, fueron técnicos reconocidos en su momento. Técnicos que participaron en numerosas pericias y trabajos para las Instituciones públicas de la Villa y el Señorío.

Juan Bautista de Orueta, significado como maestro arquitecto y perito agrimensor, aparecerá en actuaciones relevantes como el trazado del Camino a Durango, el proyecto del puente de Madera de San Francisco (que al final diseñará el académico Alejo de Miran­da), en informes para la Iglesia de Galdákao… La personalidad de Orueta parece apoyar una cierta credibilidad en relación con la au­toría de la fuente del Perro; pero no hay más que esto y las prevenidas adjudicaciones insinuadas por ” los diferentes autores que han tratado el tema.

Miguel de Maruri, nos ofrece, por otra parte, una más brumosa biografía dicho sea con todas las reservas que la misma escasez de datos confiere al tema.

En cualquier caso, el vanguardismo, para su tiempo, de la fuente del Perro es algo incuestionable. Los ecos de la arquitectura francesa del momento parecen indudables. Autores citan como referencia la obra de Poyet, nosotros añadiríamos la de Sobre, Ledoux e incluso la del inglés Soane.

Hay que señalar, en otro terreno, que la fuente preexistente en el lugar, se llamaba de los “Chorros de San Miguel” y que ése era el nombre primitivo de la calle en que se asentaba.

La reforma de la fuente en 1800, dio paso a la nueva cons­trucción, cuyos caños se asimilaron, popularmente, a la imagen de un Perro. Esta percepción popular fue causa del nuevo nombre de la fuente y por extensión, de la calle. (Texto de Elías Más Serra en el periódico Bilbao)


Pastel de Diego Hergueta de 2014
Dibujo de K Toño

El chimbo Edu Garay en colaboración con Gotzone Sáenz de Navarrete ganaron en el año 2008 uno de los premios del concurso de las ‘bilbaínadas’ con una canción dedicada a esta fuente cuya letra dice así:

San Miguel era la calle

En la que estaba la fuente;

Los chorros de San Miguel

Así le llamaba la gente,

Pero en mil ochocientos Miguel Maruri y Orueta

Fue y la cambió por completo,

Sólo quedó la pileta.

Tres arcos de medio punto

Tres caños con tres leones,

Decían que eran tres perros

Casi todos los mirones.

De decirlo los vecinos

Una y otra vez con empeño,

Ahora se llaman los dos La calle y la fuente del ‘Perro’.

¡Viva la Fuente del ‘Perro’!

que aunque agua no he probao,

en el ‘Botxo’ hasta los perros

¡Beben ‘agua de Bilbao’!

Deja un comentario